Creí podría ser para siempre
y para siempre es mucho tiempo.
Deje en la noche que se escapo muda
la vanidosa sensación de libertad
y le rasguñé al corazón los últimos
recuerdos de sus latidos sobre mi
pecho.
Hoy, o el resto de mi vida, dije...
Y sus ojos brillantes encandilaron al amanecer, ese que se pierde en la mañana.
Me atreví a entrar solo allí
en ese sitio que era para nosotros dos
subí uno a uno los escaños pero jamas aparecisteis, jamás.
Las sabanas no olían a ti
y no probé aquellos caramelos
la luz permaneció intacta y la música
te cantaba solo a ti.
No tuve sed, porque no hubo amor
el viento helado no fue necesario
y al hallarme solo allí me dormí soñandote, soñandote, soñandote.
Pero llegó el alba, el bullicio, todo
y debí de irme, y quien ayer nos observaba, solo me vio pasar. y guardo silencio al verme.
Nadie me despidió
solo ese dolor en el corazón
me acompañó como una enfermedad, y solo volví a casa.
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