Acostado al revés en mi cama,
puedo oír a las aves revolotear
saltar de rama en rama u hoja en hoja
en la pequeña palmera que hay detrás de la casa.
El viento que apenas sopla se cuela
la cortina azul se infla dejando entrar luz
en esta solitaria habitación, te pienso
el cieloraso delata mi mirada perdida
que dibuja en esas manchas lo que quiero
pero también tu perfume se cuela como el viento
oír tus pasos suaves es habitual pero no estas
el calor me tira de la cama al vació de ti
apenas el aire alcanza de tanto suspiro
camino hacia la cocina sin verte
no hay huellas tuyas, estoy solo.
El verano te extraña
igual que el camino al errante
que es quien le da sentido
con sus pasos perdidos.
El silencio lacera, tortura, quema
como lo hace el fuego o la pena.
3 comentarios:
Me emociono tu poema
Tan limpio y puro
Tan sentido
No dejes de escribir
Gracias, me halaga tan bello comentario. Y no dejaré de hacerlo.
Muchas gracias!
Publicar un comentario